Esta noche

Esta noche alguien ha muerto. Repican insistentes las campanas. Debe ser alguien importante, si no a santo de qué repican a estas horas las campanas... Ese sonido repetitivo, cansino, agobiante, que inunda cada átomo de aire, que ahoga con cada onda... Se mete en mi cabeza y me transporta. Esta noche alguien ha muerto, sí, y yo he bebido mucho. La casa está a oscuras, sólo veo desde mi cama el reflejo de la luna en la ventana. La ventana está abierta, y aún así no me quito de encima este calor sofocante. La luz blanca va a dar a mi copa, otra vez medio vacía. Las burbujas suben por el líquido ámbar, arriba, arriba. Ellas van hacia arriba, y yo busco en su viaje un empujoncito para el mío. Esta noche alguien ha muerto, y yo viajo. Viajo sin moverme, pero estoy lejos. Ellas van arriba, arriba...Yo voy abajo, abajo... Jajajajaja... Esta noche alguien ha muerto, y soy yo quien baja a los avernos... Soy yo quien llama a las puertas del infierno. Me acurruco, me hago un ovillo. Debajo de estas sábanas nada puede tocarme. "Habla, chucho, que no te escucho".

Esta noche alguien ha muerto... Si no he sido yo, ¿quién habrá sido? ¿O acaso no suenan las campanas? Si algo está claro es que esta noche he bebido..., y que alguien, en algún lugar, de algún modo, esta noche ha muerto.